Los ojos de la Muerte.

       Cesare Pavese cayó hace muy poco en mis manos gracias a mi amigo Coriolano que me habló de él. He leído poco. Solo algunos poemas. De ellos, me ha impactado enormemente "Vendrá la muerte y tendrá tus ojos", escrito poco antes de morir en la habitación de un Hotel. Se suicidó un mes de agosto de 1.950 después de haber recibido un premio por su última novela “El bello verano" (1.949). Seguramente algo  tuvo que ver la ruptura del romance que mantuvo con la actriz Cosntance Dowling. ¿Serían los ojos de Constance, los ojos de la muerte?. Espero que os guste.

Vendrá la Muerte y tendrá tus ojos.

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
-esta muerte que nos acompaña
de la mañana a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un vicio absurdo-. Tus ojos
serán una vana palabra,
un grito acallado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola sobre ti misma te inclinas
en el espejo. Oh querida esperanza,
también ese día sabremos nosotros
que eres la vida y eres la nada.
Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como abandonar un vicio,
como contemplar en el espejo
el resurgir de un rostro muerto,
como escuchar unos labios cerrados.
Mudos, descenderemos en el remolino.

Comentarios

Ángeles Jiménez ha dicho que…
La muerte, esa única certeza, tan cierta como la vida que nos separa de ella. Vivamos, bebamos, brindemos por la poesía para que nos aderece la vida con tan bellas palabras.
mabrito67@gmail.com ha dicho que…
La poesía la he descubierto hace poco. No sabía leerla. No es mi debilidad, pero ante poemas como este, no puedo evitar emocionarme. Es una pasada. Y saber que poco después de escribirlo Cesare atravesó voluntariamente la fina línea que separa la vida de la muerte para verla a los ojos, le da más valor aún, si cabe.
Yo prefiero vivir. Que quieres que te diga.
Un abrazo
mapachito ha dicho que…
Pobre autor... Haberse quedado mirando a la vida a los ojos todo el tiempo que el destino le dejase, que para ver los de la muerte ya tendría toda una eternidad...

Gracias hermano por compartir con nosotros ese poema!! lo desconocía!!
Un fuerte abrazo!!!!!!!!!!!!
mabrito67@gmail.com ha dicho que…
Cierto Alexis. Muy cierto. Lo que pasa es que aunque normalmente la muerte nos elige, en este caso el autor eligió mirarla a los ojos. Quizás, cierto, antes de tiempo. Pero eligió al fin.

Me alegra que te haya gustado.

Un abrazo
Ana J. ha dicho que…
No soy amante de la poesía. Me cuesta entrar en su estructura y los sentimientos que suele derramar, en general, me agobian o me dejan fría.
No es el caso con este poema. Gracias por regalárnoslo.
mabrito67@gmail.com ha dicho que…
Gracias a ti por leerlo y compartirlo conmigo Ana. Realmente tiene un halo que te envuelve.

Entradas populares de este blog

Un vaso de cólera - Raduan Nassar

El abuelo que saltó por la ventana y se largó - Jonas Jonasson

La tía Tula - Miguel de Unamuno